Bailando a camaron,
Empecé a sentir el duende.
por bulerias , la soleá
o el fandango verdiale.
el alma que se arrebola
y te envuelve en la magia
sin dejarte parar ,ni tregua,
se sigue el baile como un conjuro
vuelta , palmas,
y el cuerpo en un zig zag
Mientras, la noche, la luna
acompaña e ilumina
la parte más escondida
deL alma ,
se rebela el sosiego y.
sin poderlo aplacar
te arrolla lo más ancestral
algo de fuego y verdad,
que a la mañana siguiente
no queda más que la duda,
de si fué sueño ,
o remota realidad
o remota realidad
romy
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